La búsqueda del fruto del Espíritu
Para un cristiano su mayor deseo es poder obtener el fruto del Espíritu. Pero, ¿Cómo podemos saber si nuestras cualidades o forma de actuar en determinada oportunidad son producto del Espíritu Santo? Como primera medida debemos darnos cuenta que el fruto del Espíritu Santo son nueve cualidades. Que pueden ser más notable en nuestras vidas cuando las cosas se tornan difíciles. Y ¿Cómo podemos reconocer que nuestras cualidades son producidas por el fruto del Espíritu?
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A continuación, dos características que nos pueden ayudar.
1. No nos dejamos controlar por el entorno.
A diario estamos expuestos a pruebas o sufrimientos que nos pueden frustrar. Pero, aquellos creyentes que estén llenos del Espíritu Santo no serán movidos por la situación en la que puedan estar. Ellos seguirán gozosos, y fructíferos trabajando para Dios, pues saben que Dios tiene el control de todo.
2. Si caes te levantas y avanzas
Los creyentes que tienen el fruto del Espíritu no son perfecto, porque en algún momento de su caminar en Cristo hay caídas y desliz. Pero ellos son sensibles y reconocen cuando Dios los esta llamando a arrepentimiento para que continúen en la carrera. Ellos agradecen y aceptan la corrección de Dios, porque reconocen que Dios le esta revelando sus debilidades y también buscando que vuelvan a Él.
Ninguna persona por sí sola puede producir estas cualidades, por mas que nos esforcemos por ser mejores cada día no podremos. Esto solo lo podemos hacer cuando sometemos nuestra vida al dominio de Dios, y le damos todo el control de nuestra vida para que haga de nosotros conforme a su voluntad.
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