Abogado tenemos | Santidad y Comunión

Todos como cristianos en algún momento de nuestra vida hemos pecado y le hemos fallado a Dios, y hemos sentido un gran peso de culpa en nuestra vida, y en lo personal se siente algo realmente feo, porque es tanta la culpa, que quisiéramos salir corriendo y dejar todo tirado y no buscar más de Dios, te sientes sucio, y solo deseas nunca haberlo hecho, pero como dice el dicho "lo hecho, hecho está".   Pero, no podemos quedarnos solo en la culpabilidad y no avanzar, eso no es lo que Dios quiere de nosotros, lo que Dios quiere que hagamos es; ir a Él, reconocer nuestro pecado, y pedirle que nos limpie y nos ayude a apartarnos de aquella persona o cosa por la cual caímos en pecado. Eso es lo que nos dice en:  1 Juan 1:9   1 Juan 1:9 "Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.  También en 1 Juan 2:1 la palabra nos dice:  1 Juan 2:1 "Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis, y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo".  Estas dos citas las considero como un complemento la una de la otra, 1 juan 2:1 nos dice que Dios no quiere que nosotros pequemos, pero si en algún momento de debilidad caímos en pecado, nos hace saber que tenemos un abogado. Pero es en 1 juan 1:9 que nos dice lo que debemos hacer para que aquel abogado que tenemos salga en nuestra defensa.  Porque para que haya abogado, primero tiene que haber un crimen, y ¿cual es el crimen? nuestro pecado; después vienen las declaraciones, que es nuestra confesión del pecado. Y por último la defensa del abogado, para que el juez determine si hay o no condenación. Y cual es la defensa que dará Jesús ante el Padre: que él murió por nosotros y cargó todos nuestros pecados para que fuésemos libres.  Pero Jesús no saldrá en nuestra defensa si nosotros antes no le confesamos nuestro pecado. Por eso mi querido hermano(a), la actitud una vez pecamos no debe ser de lamento y culpabilidad, ni tampoco de hacer como si no fuera pasado nada. Nuestra actitud debe ser de arrepentimiento sincero, de humillación delante de Jesús, reconociendo nuestro error, y pidiendo que tenga misericordia. Nuestra confesión del pecado hará que la sangre de Jesucristo sea derramada sobre nosotros para cubrir y limpiar el pecado, para luego apartarnos de aquel pecado que cometimos. (Los abogados terrenales te defienden siempre y cuando tu les pagues, pero el que tenemos en el cielo, lo hace por amor, tanto que ya dio su vida por tu libertad).  Mi querido hermano(a) aprovecho para decir que si usted a pecado, se arrepiente, pero sigue en el pecado, usted realmente nunca se ha arrepentido, sino que lo que siente es culpa, y la culpa es algo parecido al arrepentimiento pero te lleva a hacer lo que no debes.  ARREPENTIMIENTO Es arrepentimiento cuando reconoces que te equivocaste he hiciste mal, y eso te lleva a pedirle perdón de corazón a Dios, y apartarte del pecado, y te acercas más a Dios.  CULPA Es culpa cuando reconoces que hiciste mal, le pides perdón a Dios, pero lo que sucede después es lo contrario al arrepentimiento: En lugar de apartarte sigues cayendo en el mismo pecado, y te empiezas a apartar de Dios.  Hermano(a), no hay pecado terrenal que Dios no pueda perdonar, así que si te encuentras en una condición de pecado en estos momentos y no sabes que hacer, yo te animo para que te acerques a Dios con toda la confianza como tu Padre que es, y le confieses lo que hiciste y le pidas que te perdone, porque eso es lo que Él desea, que en lugar de alejarnos de Él, nos acerquemos.  DIOS TE BENDIGA.  Si esta reflexión te ha sido de ayuda, te invito a que la compartas con tus hermanos de la fe para que también a ellos les sea de ayuda. Y también me ayudarías y me motivarías a seguir compartiendo la palabra de Dios.

Introducción

Todos como cristianos en algún momento de nuestra vida hemos pecado y le hemos fallado a Dios, y hemos sentido un gran peso de culpa en nuestra vida, y en lo personal se siente algo realmente feo, porque es tanta la culpa, que quisiéramos salir corriendo y dejar todo tirado y no buscar más de Dios, te sientes sucio, y solo deseas nunca haberlo hecho, pero como dice el dicho "lo hecho, hecho está".

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Que la culpa no te domine

Pero, no podemos quedarnos solo en la culpabilidad y no avanzar, eso no es lo que Dios quiere de nosotros, lo que Dios quiere que hagamos es; ir a Él, reconocer nuestro pecado, y pedirle que nos limpie y nos ayude a apartarnos de aquella persona o cosa por la cual caímos en pecado. Eso es lo que nos dice en:  1 Juan 1:9

 1 Juan 1:9 "Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.

También en 1 Juan 2:1 la palabra nos dice:

1 Juan 2:1 "Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis, y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo".


Estas dos citas las considero como un complemento, la una de la otra, 1 juan 2:1 nos dice que Dios no quiere que nosotros pequemos, pero si en algún momento de debilidad caímos en pecado, nos hace saber que tenemos un abogado. Pero es en 1 juan 1:9 que nos dice lo que debemos hacer para que aquel abogado que tenemos salga en nuestra defensa.

Porque para que haya abogado, primero tiene que haber un crimen, y ¿Cuál es el crimen?, nuestro pecado; después vienen las declaraciones, que es nuestra confesión del pecado. Y por último, la defensa del abogado, para que el juez determine si hay o no condenación. Y cuál es la defensa que dará Jesús ante el Padre: que él murió por nosotros y cargó todos nuestros pecados para que fuésemos libres.


Pero Jesús no saldrá en nuestra defensa si nosotros antes no le confesamos nuestro pecado. Por eso mi querido hermano(a), la actitud una vez pecamos no debe ser de lamento y culpabilidad, ni tampoco de hacer como si no fuera pasado nada. Nuestra actitud debe ser de arrepentimiento sincero, de humillación delante de Jesús, reconociendo nuestro error, y pidiendo que tenga misericordia. Nuestra confesión del pecado hará que la sangre de Jesucristo sea derramada sobre nosotros para cubrir y limpiar el pecado, para luego apartarnos de aquel pecado que cometimos. (Los abogados terrenales te defienden siempre y cuando tú les pagues, pero el que tenemos en el cielo, lo hace por amor, tanto que ya dio su vida por tu libertad).

Mi querido hermano(a) aprovecho para decir que si usted ha pecado, se arrepiente, pero sigue en el pecado, usted realmente nunca se ha arrepentido, sino que lo que siente es culpa, y la culpa es algo parecido al arrepentimiento, pero te lleva a hacer lo que no debes.


Arrepentimiento

Es arrepentimiento cuando reconoces que te equivocaste, he hiciste mal, y eso te lleva a pedirle perdón de corazón a Dios, y apartarte del pecado, y te acercas más a Dios.

Culpa

Es culpa cuando reconoces que hiciste mal, le pides perdón a Dios, pero lo que sucede después es lo contrario al arrepentimiento: En lugar de apartarte sigues cayendo en el mismo pecado, y te empiezas a apartar de Dios.

Hermano(a), no hay pecado terrenal que Dios no pueda perdonar, así que si te encuentras en una condición de pecado en estos momentos y no sabes qué hacer, yo te animo para que te acerques a Dios con toda la confianza como tu Padre que es, y le confieses lo que hiciste y le pidas que te perdone, porque eso es lo que Él desea, que en lugar de alejarnos de Él, nos acerquemos.

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DIOS TE BENDIGA

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Si esta reflexión te ha sido de ayuda, te invito a que la compartas con tus hermanos de la fe para que también a ellos les sea de ayuda. Y también me ayudarías y me motivarías a seguir compartiendo la palabra de Dios.

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